Enrique Alva Calderón |
2017-08-08 |
Allá en Coahuila, luego de mucho legislar, algo está claro: la única ley que vale es la de Moreira. Para muestra, échele un ojo al caso de la gubernatura, cuya entrega-recepción al virtual ganador RIQUELME, pese al cochinero electoral y estar bajo amenaza de anulación, continúa a toda marcha. Lo sorprendente del asunto es que incluso el instituto electoral está en sintonÃa con el ejecutivo, pues aseguró que aunque el resultado esté impugnado, no significa que la constancia de mayorÃa relativa que entregarán a RIQUELME será menos legal. ¡Qué legal, ¿no?! |