Joaquín Guzmán Loera presentó una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por un trato que afecta su dignidad, se quejó por un “trato discriminatorio”, por conducto de su pareja, Emma Coronel Aispuro, Guzmán Loera presentó una queja ante la CNDH por el “trato desigual” que recibe en el penal del Altiplano. Por seguridad, el gobierno decidió que El Chapo sea movido de celda en celda, tiene guardias y un perro que lo vigila permanentemente.

Además, en su celda ya no hay “puntos ciegos”, por lo que incluso es videograbado en el baño. Guzmán Loera indicó en su queja que lo mantienen aislado del resto de los internos, no le permiten salir al patio ni recibe estímulos como los demás. También se le impide ir al comedor, le toman lista cada hora y acusó que no puede dormir.

Además, indicó que no le dan ropa adecuada para cubrirse del frío, lo cual “pone en riesgo su vida”. El capo que fue detenido el 8 de enero asegura que no puede hablar en privado con sus abogados, sino que siempre están presentes custodios, escuchando sus conversaciones. Lo que pide es recibir un trato igual al de los demás presos.