Agricultores estadounidenses se unen a México en su intento de limitar las importaciones de maíz genéticamente modificado, en un sorprendente giro de los acontecimientos.

Durante años, los agricultores en Estados Unidos han sembrado maíz transgénico, que ha sido modificado genéticamente para protegerse contra plagas e herbicidas, utilizando semillas de empresas como Bayer, Corteva y Syngenta, de ChemChina.

Sin embargo, algunos agricultores en Estados Unidos, defensores del libre mercado, han expresado que preferirían vender maíz no transgénico a México en lugar de profundizar en una disputa comercial. Argumentan que podrían obtener un precio premium por cultivar maíz convencional.

"Estoy totalmente a favor del comercio libre y justo", dijo Fred Huddlestun, un agricultor que cultiva maíz y soya transgénicos en Yale, Illinois. "Cuando se llega al punto de presionar a alguien para que compre algo que no quiere, eso me preocupa", añadió.