Aumentaron el tercer trimestre de este año, las pérdidas de Pemex un 52 por ciento en comparación con el mismo período de 2022, alcanzando 79 mil 134 millones de pesos, a pesar de haber recibido apoyos del Gobierno que suman 806 mil millones de pesos hasta la fecha, según el reporte financiero entregado por la petrolera a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Los principales factores que contribuyeron al aumento de las pérdidas incluyen la disminución en las ventas de la empresa, el aumento en otros gastos y una pérdida cambiaria originada por la depreciación del peso frente al dólar.

A pesar de recibir apoyos fiscales y transferencias del Gobierno federal, la situación financiera de Pemex se ha visto afectada, y los bajos precios del crudo y de productos refinados, junto con un menor pago por derecho de extracción, contribuyeron a una disminución del 26.7 por ciento en los ingresos de la empresa.

Asimismo, el alto nivel de endeudamiento de Pemex, que asciende a un billón 864 mil millones de pesos, pone en riesgo sus operaciones y su capacidad para pagar la deuda por cuenta propia.

“El monto de los pasivos de Pemex es considerable y la entidad está expuesta a restricciones significativas de liquidez, lo cual podría dificultar la obtención de financiamientos en términos favorables, podría afectar la situación financiera, los resultados de operación y la capacidad para pagar la deuda por propia cuenta”, explicó la petrolera.