Liberó la refinería Deer Park, propiedad de Pemex, cerca de Houston, 43 mil 500 libras de sulfuro de hidrógeno, un gas altamente tóxico, durante más de siete horas en un accidente el pasado 10 de octubre.

El incidente provocó la muerte de dos trabajadores subcontratados y dejó 35 heridos, de los cuales 13 siguen hospitalizados. Pemex informó que la fuga excedió 800 veces el límite permitido de emisiones por hora.

La refinería, que procesa 312 mil 500 barriles de crudo al día, está operando a baja capacidad mientras se investigan las causas del accidente.

La Junta de Investigación de Riesgos y Seguridad Química de Estados Unidos ya ha iniciado una investigación formal debido a la gravedad del incidente.

Pemex, que adquirió la totalidad de la refinería en 2022, enfrenta una vez más cuestionamientos sobre la seguridad en sus instalaciones.

El director general de Pemex, Víctor Rodríguez, reconoció que varias unidades fueron cerradas tras la fuga, y que la empresa realizará las inspecciones necesarias este fin de semana. Además, el bufete Buzbee ha sido contratado por varias familias afectadas por este “horrible incidente”.